Ante la imposibilidad de caminar en línea recta, me he dado contra muchas paredes.
Al final he terminado dando vueltas a mi propio alrededor,
cerrando puertas a mis ansias,
con nudos en mi garganta, estómago, extremidades,
y cautiva de la esperanza.
"Una copita del seudo coñac - ordenó - y te zampuzarás en el sótano. Ya sabes, el decúbito dorsal es indispensable. También lo son la oscuridad, la inmovilidad, cierta acomodación ocular. Te acuestas en el piso de la baldosas y fijas los ojos en el decimonono escalón de la pertinente escalera. Me voy, bajo la trampa y te quedas solo. Algún roedor te mete miedo ¡fácil empresa! A los pocos minutos ves el Aleph. ¡El microcosmo de alquimistas y cabalistas, nuestro concreto amigo proverbial, el multum in parvo!
Repantiga en el suelo ese corpachón y cuenta diecinueve escalones.
¿cómo transmitir a los otros el infinito Aleph, que mi temerosa memoria apenas abarca? Quizá los dioses no me negarían el hallazgo de una imagen equivalente, pero este informe quedaría contaminado de literatura, de falsedad. Cada cosa era infinitas cosas, porque yo claramente las veía desde todos los puntos del universo"
* Todo individuo tiene derecho a la libertad de opinión y de expresión; este derecho incluye el de no ser molestado a causa de sus opiniones, el de investigar y recibir informaciones y opiniones, y el de difundirlas, sin limitación de fronteras, por cualquier medio de expresión.
Los cielos cuentan la gloria de Dios, Y la expansión denuncia la obra de sus manos.
2 comentarios:
atados los zapatos,
caminan ciegamente
disfrazan un suelo imaginario
no hay paredes
ves la ventana, unica salida
ansiedad, terrible movimiento
de los dedos, alcanzas con tus labios las palabras q buscas en los diccionarios.
no sientas ansiedad ni ganas de golpearte contra las paredes.
un beso fresco
chica, entiendo que este martes es como si fuera un lunes (incluso peor), pero eh!! esta semana es más corta! yujuuu!!
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